Después de los fallos perjudiciales del lunes a la noche frente a Argentinos Juniors en La Paternal, se escucharon las voces de quejas del cuerpo técnico —con Mohamed a la cabeza— y de los jugadores —con Pozo y Rivarola al frente— de Colón por los errores de Furchi a instancias de Gustavo Lechner, el árbitro asistente número 2 en el Diego Armando Maradona. En el caso de la dirigencia, no se escuchó a ningún dirigente plantear la bronca. Pero lo que no hicieron ante los micrófonos y las cámaras, lo hicieron en AFA.
Tanto el árbitro principal Rafael Furchi como el juez de línea, Gustavo Lechner, el mismo que habilitó a Calderón estando en clara posición prohibida, no fueron designados para la fecha de este fin de semana en Primera División. Pero, además, en el caso de Lechner, quedó desafectado por el error para el resto del campeonato de Primera.
Sin dudas que Colón hizo oír sus quejas en el Colegio de Árbitros, pero ante la evidencia de los errores, no hubo demasiada resistencia ante el pedido de sanción de los dirigentes sabaleros.
Además del error en sí, algo que molestó y mucho cuando los dirigentes intentaron pedirle una explicación después del partido en el vestuario de La Paternal, fue el modo en el que se desempeñaron árbitro y juez de línea en la charla, casi rayando la falta de respeto. “Encima que se equivocan, son maleducados”, se escuchó.
Evidentemente que esta vez Colón se sintió estafado e hizo escuchar su voz con todo en la AFA. Los dirigentes, más allá de hacer lo que les corresponde hacer en estos casos, generaron un mensaje por elevación para Mohamed y los jugadores a los que todavía les dura el enojo por lo del lunes en La Paternal
viernes, 16 de abril de 2010
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